Cómo lavar tus trajes clínicos para que duren más tiempo

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Aunque en un inicio pueda parecer irrelevante, el lavado de nuestros uniformes médicos es un tema fundamental en el que profundizar por parte de la comunidad de profesionales de la salud.

Este tipo de vestimenta está expuesta a muchas manchas y bacterias, por lo que lavarla adecuadamente ayuda a garantizar que tanto el personal de salud como su familia se mantengan saludables. ¡En definitiva, el lavado de los uniformes es una parte importante de estos profesionales en cualquier ámbito!

Todos los modelos uniformes clínicos que se usan en entornos hospitalarios son propensos a la suciedad, las manchas y los líquidos que pueden surgir con la vida diaria trabajando ya sea como médico, enfermera, veterinario, laboratorista TENS o cualquier otra profesión afín, por lo que es importante mantener las mejores prácticas al lavar los uniformes y tratar las manchas, para que así tu ropa de trabajo médica se vea y se sienta como nueva.

Además, en esta nueva era post COVID-19, la necesidad de desinfectar adecuadamente sus uniformes médicos se vuelve aún más importante. Es por eso que hoy te traemos varios tips para mantener tus uniformes higiénicos y que te duren más tiempo. ¡Dale un vistazo a estos consejos para limpiar tus uniformes y mantenerlos impecables!

  • Manipulación de los uniformes antes del lavado

Primero, se recomienda usar guantes al momento de manipular ropa de este tipo, manteniéndola siempre lejos de la cara. De igual forma es importante colocar los uniformes sucios en una bolsa de plástico con cierre hermético hasta que se puedan lavar. 

  • Trata las manchas previamente

Las manchas en nuestros uniformes son inevitables, y la mejor manera de lidiar con ellas es tratarlas antes de ponerlos en la lavadora, de lo contrario, éstas podrían fijarse en caso de no desaparecer por completo.

Es importante tomar en cuenta qué fue lo que produjo la mancha para darle el tratamiento adecuado (por ejemplo, si es una mancha de sangre, lavar con agua fría).

  • Dales la vuelta al momento de lavar

Dar la vuelta a las prendas antes de lavarlas es un método comprobado para preservar el color y la duración de las mismas. Al hacerlo, se evita la formación de bolitas o la abrasión excesivas en la superficie de la tela, manteniéndola en buenas condiciones.

La formación de bolitas es causada por el desgaste normal de la prenda. y en realidad no afecta la funcionalidad de tu uniforme, pero sí incide en tu apariencia profesional dando un look desgastado.

También es importante secar tus trajes del revés para reducir las posibilidades de que el color se desvanezca.

  • No laves los trajes clínicos con el resto de tu ropa

Lo mejor y más seguro será siempre lavar tanto tu pantalón clínico como las poleras por separado de tu otra ropa para evitar la contaminación accidental.

  • Nunca uses cloro

El uso de cloro y otros agentes abrasivos en tu ropa causarán probablemente que se destiña. En lugar de ello, prefiere lavarlos con detergente normal para ropa de buena calidad.

  • Planchado a baja temperatura.

Aunque por lo general no es necesario planchar los uniformes médicos hechos de mezclas que incluyen poliéster, puedes hacerlo si lo prefieres, eso sí, se recomienda una configuración más bien tibia.

  • Frecuencia de lavado

Siempre lava tus uniformes después de usarlos una vez. Es muy importante que estén frescos y desinfectados para cada turno de trabajo! Así las bacterias y los gérmenes no se propagan. Si tus uniformes son de buena calidad, se pueden usar durante mucho tiempo porque están hechos para resistir el lavado y el secado constantes.

Cuando se trata de cuidar tus uniformes, seguir los pasos que te hemos explicado será la mejor manera de mantenerlos con el mejor aspecto posible, a la vez que te aseguras que estén libres de gérmenes antes de su próximo turno.

Si tu armario está lleno de trajes clínicos de apariencia gastada, colores opacos y telas deformadas… considera actualizarlo con uniformes médicos de una mayor calidad. El costo inicial se verá recompensado cuando descubras que resisten mejor los lavados frecuentes sin deteriorarse. Además, a menudo tienen características adicionales, como tela repelente de fluidos, que los ayuda a mantenerse más higiénicos.

¡Será una excelente inversión para tu salud, la de tus pacientes y tu propia apariencia profesional!

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